El movimiento social impulsado por la ‘Generación Z’ en la Ciudad de México vivió una jornada de contrastes este martes 19 de noviembre de 2025. Mientras que la movilización transcurrió en completa paz y sin incidentes de violencia, la convocatoria registró una afluencia escasa, muy por debajo de la participación masiva que había caracterizado la primera protesta del 15 de noviembre en la capital.
Este desenlace pacífico, aunque con menor número de participantes, fue recibido con cautela por las autoridades. La marcha se desarrolló bajo consignas de unidad y reivindicación social, siendo coreadas frases como “¡El pueblo unido, jamás será vencido!” y “¡No somos enemigos, somos el pueblo!”. Estos mensajes reflejaron un esfuerzo de los organizadores por deslindarse de los actos vandálicos que opacaron la jornada anterior y reafirmar el carácter cívico de sus demandas.
Factores de la Baja Convocatoria y el Contexto Nacional
El reducido número de participantes plantea serios interrogantes sobre la sostenibilidad del movimiento horizontal. Analistas sugieren que la baja asistencia de esta segunda marcha puede atribuirse directamente a la polarización generada tras los disturbios previos y la respuesta institucional:
- Temor a las Consecuencias Legales: La Fiscalía de la CDMX imputó graves cargos, incluyendo tentativa de homicidio, a 18 detenidos de la primera marcha. Este riesgo penal actuó como un poderoso factor disuasorio para la base estudiantil y pacífica.
- Desgaste Oficial: La narrativa del gobierno federal y capitalino, que desestimó el movimiento como una acción “no espontánea”, sembró dudas sobre la legitimidad de la protesta.
- Priorización de la Paz: La intención de los propios jóvenes de evitar una nueva confrontación pudo haber influido en la baja convocatoria, buscando privilegiar el mensaje sobre la fuerza.
El contraste con la primera marcha, que fue un fenómeno de masas, muestra la fragilidad de estos movimientos organizados a través de redes sociales para mantener la inercia sin una estructura política tradicional.
La SEDENA Mantiene el Recorte del Desfile
La calma de esta segunda jornada no modificó la logística de seguridad que ya estaba en marcha. La Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) confirmó el mantenimiento de la modificación y el recorte de la ruta del tradicional desfile cívico-militar del 20 de noviembre.
La decisión de tener el desfile 20 noviembre recortado fue una medida de prevención tomada tras la masiva y violenta protesta anterior. Aunque la segunda marcha transcurrió en paz, las autoridades mantienen la cautela y la seguridad reforzada en el Centro Histórico, subrayando que la tensión social generada por la Generación Z sigue siendo un factor determinante en la planificación de eventos cívicos nacionales.
La segunda marcha Gen Z en la Ciudad de México fue una clara demostración de que el movimiento busca redefinir su imagen hacia la paz y la unidad. Sin embargo, su capacidad para incidir en la agenda pública de manera masiva ha sido mermada por los incidentes anteriores, poniendo en tela de juicio su poder de convocatoria a largo plazo.
