Candidato Presidencial de Perú es Definido por un Inédito ‘Volado’

En una situación sin precedentes en la política peruana reciente, el partido Salvemos al Perú seleccionó a su candidato presidencial, Antonio Ortiz, mediante un 'volado' o sorteo. La inusual decisión se tomó tras un empate técnico irresoluble en las votaciones internas, a menos de cinco meses de las elecciones generales de abril de 20
Foto: Volado Antonio Ortiz - Perú - @Agencia_Andina
Foto: Volado Antonio Ortiz - Perú - @Agencia_Andina

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La contienda electoral con miras a las elecciones generales de Perú de 2026 ya ha entregado su primer titular inesperado. Este sábado 13 de diciembre de 2025, el partido Salvemos al Perú anunció que el candidato que los representará en la papeleta presidencial es Antonio Ortiz, cuya nominación se resolvió mediante un ‘volado’ (lanzamiento de una moneda) ante un empate irresoluble en las instancias internas.

La inaudita escena, confirmada por la Comisión Electoral de la agrupación política, se convierte en un precedente en la política peruana, generalmente marcada por los conflictos internos y las renuncias de último minuto. Esta decisión se tomó a menos de cuatro meses de que los peruanos acudan a las urnas el 12 de abril de 2026 para elegir a su próximo presidente.

Contexto: Un Empate Técnico y Estatutos Estrictos

El partido Salvemos al Perú había celebrado un proceso de votación interna para elegir a su abanderado entre dos figuras principales: Antonio Ortiz y la economista Elena Rojas. Tras una reñida votación entre los delegados y tres rondas de desempate, ambos candidatos quedaron separados por apenas un voto, lo que técnicamente constituyó un empate en el marco de sus estatutos.

La Comisión Electoral, presidida por el jurista Carlos Alarcón, explicó que la legislación interna del partido, diseñada para prevenir la parálisis política, establece un mecanismo de “Resolución de Empate Final por Sorteo Aleatorio” en caso de que las votaciones no logren una diferencia de al menos dos puntos porcentuales tras las rondas de desempate.

Declaraciones Verificables (Comisión Electoral):

“Nuestros estatutos son claros. Llegamos a un punto muerto. Para evitar una prolongación de la crisis interna que afectaría nuestra preparación para las elecciones de abril, la Comisión, de acuerdo con el artículo 47 de nuestro reglamento interno, procedió con el sorteo”, explicó Alarcón en una conferencia de prensa posterior al evento. El sorteo se realizó con la presencia de fedatarios y representantes legales de ambos precandidatos.

Cronología del Sorteo y Reacción del Vencedor

El ‘volado’ se llevó a cabo a puerta cerrada en la sede central del partido en Lima. Según los reportes de los observadores, se utilizó una moneda certificada por el Banco Central de Reserva del Perú para garantizar la aleatoriedad del resultado.

Tras el lanzamiento, Antonio Ortiz fue el vencedor para representar al partido Salvemos al Perú. El momento, aunque insólito, fue capturado en video y rápidamente difundido, generando comentarios polarizados sobre la seriedad del proceso democrático.

Al ser proclamado ganador, Antonio Ortiz, un empresario con experiencia en el sector público, ofreció un discurso en el que combinó la aceptación del destino con un llamado a la unidad del partido.

Declaraciones Verificables (Antonio Ortiz):

“Mi victoria no es solo cuestión de suerte; es la demostración de que, en Salvemos al Perú, estamos dispuestos a acatar cualquier resultado democrático en favor de la unidad del partido. La moneda ha hablado, y ahora mi compromiso es con el destino de nuestra nación. Invito a la economista Rojas y a todos nuestros militantes a cerrar filas. El único adversario es la inestabilidad que vive nuestro país”, declaró Ortiz, enfatizando que el método utilizado, aunque poco ortodoxo, fue transparente.

Reacciones: Sorpresa, Controversia y el Factor Ibai

La reacción en el panorama político peruano fue de total sorpresa. Analistas y comentaristas políticos señalaron que, si bien el mecanismo cumple con la ley interna del partido, proyecta una imagen de improvisación en un momento donde la estabilidad es crucial para el electorado peruano.

Algunos críticos argumentaron que un proceso tan trascendente como la nominación presidencial no debería depender de un sorteo, sin importar lo que dicten los estatutos internos. Sin embargo, los simpatizantes de Ortiz defendieron el método como un acto final de compromiso democrático, señalando que los candidatos agotaron todas las vías de votación legítimas.

La candidata perdedora, Elena Rojas, felicitó públicamente a Ortiz y anunció que se sumaría a su campaña, cumpliendo su promesa de respetar la decisión del sorteo. “Acatamos los estatutos y apoyaremos la candidatura de Antonio Ortiz. Nuestro compromiso es con el país, no con las aspiraciones personales”, afirmó Rojas, buscando mitigar la imagen de caos que el sorteo podría haber generado.

La insólita definición de la candidatura se perfila como un factor que dominará el debate en las próximas semanas, obligando al partido Salvemos al Perú a concentrar sus esfuerzos en demostrar la solidez de su proyecto de gobierno de cara a las elecciones del 12 de abril de 2026.

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