Hoy, 12 de diciembre de 2025, la República Mexicana se paraliza para conmemorar el día de la Virgen de Guadalupe, Patrona de México y Emperatriz de América. Esta fecha no solo marca el final de la serie de apariciones marianas al indígena San Juan Diego Cuauhtlatoatzin en el Cerro del Tepeyac en 1531, sino que es el punto culminante de la peregrinación más grande y constante del continente, centrada en la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México.
La devoción a la “Morenita del Tepeyac” es un pilar de la identidad nacional mexicana, entrelazando la fe con la historia y la cultura. La celebración de este año, que marca el 494 aniversario de las apariciones, se realiza bajo un operativo de seguridad masivo en la capital, donde se estima la concentración de más de 10 millones de peregrinos que han arribado desde días previos para asistir a la misa de medianoche y la tradicional entonación de Las Mañanitas.
El Origen de la Celebración: Aparición y Mensaje
La festividad del 12 de diciembre conmemora el momento en que, según la tradición católica, la Virgen de Guadalupe dejó su imagen impresa en el ayate de Juan Diego. Este hecho ocurrió después de la última de las cuatro apariciones reportadas, ocurridas entre el 9 y el 12 de diciembre de 1531.
Datos Verificables:
- Lugar: Cerro del Tepeyac, al norte de la actual Ciudad de México.
- Mensaje Central: La Virgen pidió a Juan Diego que intercediera ante el obispo Fray Juan de Zumárraga para la construcción de un templo en su honor.
- La Prueba: Ante el escepticismo del obispo, la Virgen hizo florecer rosas de Castilla en pleno invierno, un hecho milagroso que Juan Diego llevó al prelado en su tilma. Al desplegarla, se reveló la imagen de la Virgen impresa, un evento que marcó el inicio de la evangelización masiva.
El relato de las apariciones se documentó en el Nican Mopohua, texto escrito en náhuatl, que sirve como la fuente histórica y teológica fundamental de la devoción guadalupana, la cual es vista como un símbolo de la inculturación del Evangelio en el continente.
La Basílica: Un Recorrido por la Historia y la Arquitectura
La historia arquitectónica del santuario guadalupano es un reflejo de la fe creciente y de los desafíos geológicos que presenta la Ciudad de México.
La Antigua Basílica (Templo Expiatorio a Cristo Rey): El primer templo de grandes dimensiones se construyó en el mismo lugar donde Juan Diego mostró el ayate. Inaugurado en 1709, este recinto fue el corazón de la devoción durante casi tres siglos. Sin embargo, debido al hundimiento constante del subsuelo lacustre de la capital, la estructura comenzó a sufrir graves daños, inclinándose peligrosamente y volviéndose insegura para la afluencia de millones de fieles. Tras la construcción del nuevo recinto, la Antigua Basílica fue cerrada, aunque posteriormente se restauró y se reabrió como el Templo Expiatorio a Cristo Rey.
La Nueva Basílica (Inaugurada en 1976): Ante la necesidad de albergar a la creciente multitud de peregrinos y proteger el ayate, se construyó el moderno santuario, diseñado por el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez.
- Dato de Diseño Confirmado: Su diseño circular y sin soportes internos permite una visibilidad óptima de la imagen de la Virgen desde cualquier punto, y su forma de carpa o tienda busca evocar la tienda del encuentro en la tradición bíblica.
- Capacidad: El recinto tiene una capacidad para más de 10,000 personas en su interior, con espacio en el atrio exterior para decenas de miles más. Fue inaugurada el 12 de diciembre de 1976.
Las Visitas Papales: Tres Pontífices en el Tepeyac
La importancia de la Basílica de Guadalupe ha sido reconocida por la Santa Sede a lo largo de los siglos, destacando las visitas de varios Sumos Pontífices, quienes han querido rendir homenaje a la Patrona de América en su propia casa.
- San Juan Pablo II (El Peregrino Fiel): El Papa polaco realizó tres visitas a México, y en todas ellas el santuario del Tepeyac fue un punto central.
- Enero de 1979: Primera visita histórica de un Papa a México, donde aclamó a la Virgen como Estrella de la Evangelización.
- Mayo de 1990: Visitó la Basílica para beatificar a Juan Diego.
- Julio de 2002: Regresó para canonizar a Juan Diego, elevándolo a los altares como el primer santo indígena de América.
- Papa Benedicto XVI (El Papa de la Transición): Aunque visitó México en 2012, su agenda se centró en Guanajuato, sin visitar la Basílica.
- Papa Francisco (El Papa Latinoamericano): El primer Papa latinoamericano visitó la Basílica en febrero de 2016. En su emotiva visita, pasó varios minutos en silencio frente al ayate, un gesto que fue ampliamente documentado y valorado por el pueblo mexicano como una profunda comunión con la fe guadalupana.
Reacciones y Actualidad
Hoy, en el 12 de diciembre, las principales celebraciones litúrgicas se concentran en el recinto. Las autoridades eclesiásticas, encabezadas por el Arzobispo Primado de México, ofician la Solemne Misa de las Rosas al mediodía, un acto que es transmitido a nivel nacional.
La Arquidiócesis Primada de México ha declarado que el mensaje de la Virgen sigue siendo de actualidad, llamando a la unidad, la paz y la esperanza. En el atrio, la emoción de los peregrinos que lograron llegar a tiempo para la misa central es palpable, consolidando este día no solo como una fiesta religiosa, sino como la máxima expresión de la identidad y la fe de la nación mexicana. La jornada se desarrolla en orden, con las fuerzas de seguridad vigilando los flujos peatonales y vehiculares en las inmediaciones del santuario mariano.