La arena política de la Ciudad de México se prepara para una nueva demostración de fuerza. La Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo convocó este lunes a sus simpatizantes a una concentración masiva en el Zócalo capitalino el próximo viernes 6 de diciembre de 2025, en el marco del séptimo aniversario de la llegada de la Cuarta Transformación (4T) al poder.
El llamado de Sheinbaum convoca marcha 6 diciembre tiene un claro componente político y estratégico, ya que se produce inmediatamente después de que las marchas opositoras de la “Generación Z” generaran controversia y debate sobre el descontento social.
El Mensaje de la Presidenta: Falsos Argumentos de Enojo
Durante su conferencia de prensa matutina, la mandataria argumentó que la movilización se enmarca en los avances registrados en los últimos siete años y que busca demostrar la solidez del proyecto de gobierno.
La Presidenta Sheinbaum fue categórica al responder a la narrativa de los críticos y opositores que sugieren un descontento generalizado: “Esta idea de que hay enojo [en la ciudadanía], quiero decirles que estamos fuertes, nuestro movimiento está muy, muy fuerte”. Su postura es que la mayoría de las y los mexicanos decidieron el rumbo del país en 2018 y que el respaldo popular prevalece sobre las manifestaciones minoritarias.
La concentración en el Zócalo es, por lo tanto, una medición de fuerza que busca contrarrestar la narrativa de las protestas recientes, las cuales fueron calificadas por funcionarios del gobierno de la 4T como movilizaciones con intereses políticos y una baja asistencia juvenil genuina.
La Polarización en el Zócalo
La marcha de apoyo, que se sumaría a otras movilizaciones realizadas por simpatizantes de la 4T en años anteriores, servirá para recordar la fuerza del movimiento. Se espera la participación de legisladores, gobernadores y militantes de Morena, el PT y el Partido Verde Ecologista (PVEM), con una afluencia significativa desde el Estado de México y la Ciudad de México.
La Sheinbaum convoca marcha 6 diciembre se convierte en la respuesta directa a la irrupción de los jóvenes en las calles, donde se exigieron cambios en la política de seguridad y la atención a la falta de servicios. Al convocar a esta manifestación de apoyo, la Presidenta busca refrendar el “mandato del pueblo” y cerrar filas con su movimiento frente a los ataques y cuestionamientos opositores.
La jefa del Ejecutivo Federal insistió en que el movimiento se mantiene unido por principios de “honestidad, paz, democracia y justicia”, y que no se dejará desviar por quienes buscan mantener los privilegios del pasado.
